Mientras la población ha madurado, hemos visto la necesidad de trabajar con ninos en colegios y adolescentes de mayor edad. Una de las formas de hacer esto es a través del patrocinio de equipo ambos masculinos y femeninos. Al ser parte de un equipo, la juventud aprende muchas habilidades que son necesarias en la vida y, quizás más importante, ver los coordinadores y entrenadores como compañeros en su crecimiento como humanos.
La Fundación ha proveído cuido medico para todos los miembros del equipo, transporte ida y vuelta de los partidos, apoyo en los partidos, uniformes y equipo y actividades celebratorias al final e inicio de la temporada. Nuestros equipos ahora juegan en una liga organizada en las afueras de La Carpio y han podido mantenerse y jugar bien contra equipos de juventud con mejor infraestructura y apoyo familiar.